7 dic 2012

Simplemente duele vivir

La teoría, por muy refinada, reflexionada, ponderada y aterrizada que intente ser, nunca podrá suplantar a la experiencia de los fenómenos y los acontecimientos.

Los psicólogos podrán elaborar muchas teorías acerca del comportamiento, el desarrollo humano y el crecimiento, pero éstas nunca podrán aportar el aprendizaje que comporta la experiencia, el tomar de decisiones, enfrentar disyuntivas.

En ocasiones la teoría acerca del dolor elaborada por el más docto de los filósofos no se acerca ni siquiera un poco al sentimiento del dolor, el físico, pero especialmente el espiritual.

Hay ocasiones en las que sencillamente lo que queda por expresar es que duele vivir y duele tomar decisiones.

La paradoja reside en que muchas veces teorizamos sobre ello, y hasta corrientes de pensamiento formamos –el estoicismo es una de ellas- pero todo eso es en ocasiones superado por el fracaso personal, la incertidumbre y el miedo.

En ocasiones no hay algo a lo que asirse, ni remedio o consuelo.

Sólo queda la soledad.

1 comentario:

Georgells dijo...

Y aprovechando que acabo de pasar, pues leí los demás posts.

Este sí que es un desahogo. Contrasta con tu último texto, donde el deporte parece haber compensado el dolor que aquí expresas.

El dolor es una experiencia eminentemente íntima. Sin embargo, a pesar de ser tan personal, nos hermana con el resto del mundo, pues todos han sufrido o sufren, de muchas maneras... A veces lo que hace falta es hablar con alguien que haya experimentado un dolor similar.

Como sea, el sol siempre vuelve a salir. Y brilla igual para todos.

Un abrazo!

G.